Objetivos de los cursos de reanimación ...
Como ya sabéis, en Formación y Salud nos preocupamos por vuestra salud y la de vuestra familia. Creemos que lo importante es estar concienciados de que todas nuestras acciones repercuten de algún modo en nosotros y que una buena educación es la base para que en un futuro todos seamos conscientes de lo importante y frágil que es la salud. Ya se dice siempre que sólo echamos en falta la buena salud cuando nos falta, tener presentes siempre el agradecimiento de estar sanos hará que sepamos reaccionar cuando nos encontremos mal.
Valorar todos los días nuestra salud y la de los que nos rodean nos hará ser más felices y tener inquietud por formarnos en ciertos aspectos de la vida que creíamos reservados para el personal sanitario. Recibir formación sanitaria elemental puede ayudarnos en situaciones de emergencia, por lo menos estaremos calmados al no enfrentarnos a algo completamente nuevo, y también nos proporcionará herramientas para cuidarnos día a día.
Hoy queremos explicaros cuáles son los objetivos de los cursos de reanimación cardiopulmonar, normalmente conocidos como CRP en el entorno médico. Estos cursos nos proporcionan habilidades importantes para reaccionar ante una emergencia y son importantes aunque creamos que nos van a enseñar algo que ya sabemos.
A continuación encontraréis un listado de los principales objetivos de los CRP:
- Reconocer una parada cardiopulmonar
- Conocer los fundamentos básicos de reanimación cardiopulmonar
- Técnicas para aplicar la reanimación cardiopulmonar
- Identificar arritmias del corazón
- Conocer el protocolo de actuación ante una emergencia
- Conocer las diferencias entre las técnicas de reanimación cardiopulmonar en adultos y en niños
Puede que estos puntos que denominamos básicos te parezcan complicados de aplicar, pero los cursos de reanimación cardiopulmonar no pretenden convertirte en un especialista médico, el objetivo principal que es que obtengas unos conocimientos básicos que te hagan reaccionar con calma ante una emergencia.
Cursos de soporte vital básico (SVB)
Después de nuestras dos últimas entradas tenemos bastante claro cómo reaccionar ante una parada cardiorrespiratoria. Al menos conocemos los pasos a seguir y somos conscientes de que deberíamos asistir a un curso, que nos ocupará como mucho una tarde, para aprender a aplicar los conocimientos teóricos que casi todos hemos oído en muchas ocasiones.
Quien más y quien menos había oído hablar de “hacer el boca a boca” desde pequeño, la diferencia es que hemos aprendido que también hay que comprimir el pecho para incentivar el ritmo del corazón y a llamarlo “reanimación cardiorrespiratoria”.
Y una vez que teníamos todo claro y nos sentíamos confiados y seguros, hemos empezado a escuchar en los medios un concepto diferente que de nuevo nos despista: soporte vital básico.
Entonces, ¿qué es el soporte vital básico? Habitualmente se define como unas medidas que debe conocer todo el mundo ya que son aquellas que se deben practicar cuando alguien sufre una parada cardiorrespiratoria. Estas medidas se dividen en dos fases, la primera es alertar cuanto antes al personal médico cualificado, la segunda es valorar el estado de la víctima y, si es necesario, realizar las compresiones y la ventilación artificial. Tras estas medidas que cualquier ciudadano puede realizar, los servicios médicos cualificados procederán a realizar las descargas eléctricas utilizando el método de desfibrilación y posteriores cuidados médicos.
Efectivamente, has acertado con tu respuesta, son dos nombres diferentes para un mismo concepto. Si ya sabes cómo realizar una reanimación cardiorrespiratoria no debes preocuparte más. Si aún no tienes conocimientos de primeros auxilios, puedes acudir a cualquiera de los muchos cursos de soporte vital básico, conocido como SVB, que se imparten actualmente para sentirte preparado ante cualquier emergencia.
La aplicación de las técnicas de soporte vital básico son las mismas en cualquier situación, no te despistes si ves cursos destinados para ciertos profesionales en concreto. Habitualmente se imparten cursos para profesionales para poder poner ejemplos de situaciones comunes en las que te puedes encontrar en tu día a día, o como parte del plan de formación de la empresa. Sin embargo, sí es aconsejable acudir a cursos específicos para padres o para docentes ya que sí que existen algunas diferencias entre aplicar el soporte vital básico a un adulto o a un niño. Por ejemplo, la fuerza con la que se deben realizar las compresiones o el número de ventilaciones a realizar.